A pesar de que ya estaba estipulado en el código de conducta de Nintendo, la empresa de entretenimiento creadora de hardware de videojuegos, que no se aceptaba conductas de discriminación por sexo, género, discapacidad, religión, credo, etnia, raza, condición social, entre otras, a principios de julio la empresa avanzó en materia de derechos laborales LGBT.
Con la nueva actualización de su estrategia de responsabilidad social corporativa, Nintendo anunció que extendería los derechos laborales para que las parejas del mismo sexo y las uniones de hecho tengan los mismos derechos que tienen las parejas heterosexuales.
Esto es un cambio muy significativo en términos de derechos laborales LGBT ya que en Japón, la ciudad natal de Nintendo, el matrimonio igualitario no está reconocido por la ley. Esto significa un progreso para la igualdad y la libertad de las personas diversas en el entorno laboral.
Asimismo, el fabricante de hardware sacó un comunicado en donde se afirma que: “Revisamos nuestras normas internas sobre acoso para prohibir claramente los comentarios discriminatorios basados en la orientación sexual o identidad de género, así como revelar la orientación sexual privada de alguien en contra de su voluntad”.
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Esto alineándose a lo que Shuntaro Furukawa, el presidente de la compañía, expresó asegurando que la idea era “crear un entorno en el que cada uno de nuestros diversos empleados pueda desarrollar plenamente sus talentos”.
Nintendo, que es una de las empresas japonesas con más riqueza y valor en el mercado, sigue punteando a ser una de las organizaciones con políticas de responsabilidad social más reconocidas en el mundo.
Matrimonio igualitario en Japón
A pesar de que Japón es uno de los países asiáticos más liberales, a comparación de Singapur, por ejemplo, donde el sexo gay sigue considerado un delito, es el único país del Grupo de los Siete (un foro político intergubernamental conformado por Alemania, Canadá. Estados Unidos, Francia, Italia, Reino Unido y Japón) que no reconoce las uniones civiles ni el matrimonio de las personas del mismo sexo.
De hecho, el lunes 20 de junio del 2022, el tribunal del distrito de Osaka desestimó una demanda a favor del matrimonio igualitario. Pues, tres parejas del mismo sexo le pedían al gobierno una indemnización debido a que el no reconocimiento del matrimonio igualitatio violaba su derecho constitucional a la igualdad.
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Sin embargo, el tribunal argumentó que en la Constitución la definición del matrimonio no incluye la unión de personas del mismo sexo, por ende, la prohibición de esta no es inconstitucional.
En el 2016, Sapporo en Hokkaido reconoció a las parejas del mismo sexo otorgándoles un estatus de relación matrimonial. Este “contrato matrimonial” ya existía en algunos municipios como Shibuya y Setagaya en Tokio y Naha en Okinawa. Sin embargo, aunque permite que las parejas sean reconocidas como matrimonio ante la ley, están a muchos pasos de distancia de llegar realmente a lo que llamamos matrimonio igualitario.
¿Por qué es tan importante que Nintendo le haya dicho sí a los derechos laborales LGBT?
Como se mencionaba anteriormente, Nintendo es una de las empresas con más riqueza y valor en el mercado. Nació en 1889, cuando su fundador Fusajiro Yamauchi quiso crear una empresa para producir las barajas tradicionales de cartas japonesas y le puso Nintendo Koppai. Fue hasta 1977 cuando comercializó su primera consola e hizo unión con el artista gráfico Shigeru Moyamoto, quién con el tiempo creó la estética de juegos como Mario Bros y Donkey Kong.
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En marzo del 2021, europapress sacó una nota en la que informaba que Nintendo había cerrado su año fiscal “con un beneficio neto atribuido de 480.376 millones de yenes (3.649 millones de euros) lo que se supone un incremento del 85,7% en comparación con el ejercicio anterior…”.
El hecho de que una empresa de este calibre económico y social haga un posicionamiento a favor de apoyar los derechos laborales LGBT en el matrimonio igualitario para sus trabajadores es, sin duda, una sacudida a su país donde las uniones civiles ni el matrimonio del mismo sexo son constitucionales.
