Tener una relación de pareja es muy difícil, existen muchas expectativas, miedos, inseguridades y desafíos. Parte del trabajo para poder lograr tener una buena relación y una relación sana es poder desdramatizar el vínculo y lograr poder ver las cosas por lo que son, sin tantas presiones y apostando al acompañamiento desde el respeto y el cuidado.
Ser realista
Es importante tomar la relación de pareja como uno toma otras relaciones. A veces tenemos muchas expectativas acerca de lo que esperamos, queremos, y nos imaginamos que debe ser. Mucho de esto viene de idealizaciones producto de nuestros consumos culturales. Tener un pareja no te hará feliz instantáneamente ni te hará sentirte completo. Pensar que esto es así te frustrará muy pronto y pondrá un peso sobre la relación que siempre se encontrará en falta. Es mejor tomar la relación por lo que es: una persona que quiere pasar tiempo con vos, tener planes a futuro juntxs, ser felices pero también poder pasar por dificultades y superarlas.
Mantén tu autonomía
En relación al punto anterior, pensar que la otra persona es responsable de tu felicidad es una receta para desastre. Si bien estar en pareja es compartir y acompañarse en un plan de vida en conjunto, la otra persona no puede ser responsable de que vos seas lo mejor que puede ser o que cumplas tus propios deseos. Tener proyectos propios, amigxs separados, hobbies, etc colaborará para que vos te sientas bien con vos mismx y seas tu mejor versión.
Ser realista y mantener tu autonomía quitaran mucho del peso y baches que unx pone en el camino de la felicidad en pareja. Muchas de las ansiedades y miedos que tenemos respecto de la otra persona y su compromiso tienen que ver con todo lo que nos condiciona a pensar que el otro es responsable de nuestra felicidad.