La tendencia de los NFT es una apuesta al aumento de posibilidades de incluir nuevos colectivos que logren dejar huella desde sus diversas formas de expresión. Aquí la creatividad es el punto de partida para crecer en espacios donde los sujetos tengan nuevas conexiones y experiencias que marquen sus percepciones del arte y la cultura.
Esta es la invitación de DEVOTION NFT, el primer NFT en crear una experiencia sensorial con el arte dando visibilidad a las personas queer y no binarias. Además de generar conciencia sobre la brecha social actual para ayudar a redistribuir el enorme capital que generan las criptomonedas y el NFT.
¿Qué son los NFT?
El concepto NFT surge en principio de un token, el cual se entiende como una serie de datos informáticos que no tienen ningún valor, los cuales se diferencian de las ya conocidas criptomonedas que constan de un sistema de valor agregado y pueden intercambiarse. Por su parte, los non-fungible token (NFT) -por sus siglas en inglés- son los que no pueden reemplazarse y se codifican para que sean completamente auténticos.
En este caso, la tecnología juega un rol fundamental, pues le concede a la obra las herramientas para ser versátil, habitar diversos espacios y perdurar en el tiempo. Obras digitales como estas también se pueden encontrar en memes, gifs, clips de audio o video e incluso un tuit.
DEVOTION NFT, arte digital
DEVOTION NFT es una nueva apuesta al arte donde se une el mundo digital con el físico, haciendo que la persona sea parte de la obra de arte. Siendo esto una manera de explorar los límites de los humanos con la tecnología. Cuenta con una colección limitada de diez NFT que salen del marco tradicional de solo “imagen y video”, pues su propuesta consiste en que estas obras sean redimidas por el comprador por una noche de experiencia inmersiva en el arte.
Es así como el gran reto e invitación de este arte es a la inclusión de mujeres, queers, personas no binarias, de color y bajos ingresos, a partir de una reforma en cómo se entiende el cryptoarte. De esta manera, se amplían los espacios para su activa participación desde ser parte de los modelos de los NFT y/o ser compradores de estas experiencias.
Es posible que bajo estas grandes tendencias artísticas y tecnológicas, estas iniciativas sean espacios seguros para movimientos feministas y de la comunidad LGBTIQ+, con el fin de visibilizar la resistencia y expresión de sus luchas por la diversidad.
Un caso conocido es el de Pussy Riot, un colectivo ruso feminista de punk-rock que espera lanzar un NFT para su más reciente proyecto musical, donde presentan escenas de apoyo a los derechos de la comunidad LGBTIQ+, el feminismo, la libertad de expresión y en contra de la represión de los movimientos artísticos bajo el régimen ruso. Lo recaudado se destinará a estos colectivos y de igual manera se espera que grupos musicales como este sean referente en acercar a la ciudadanía a participar en estas nuevas modalidades del arte. Además, extienden la invitación a artistas feministas que buscan día a día un reconocimiento y espacio para sus muestras artísticas.
Esta nueva revolución y espacio digital desde una experiencia inmersiva es el más reciente consumo de arte y cultura, con tendencias en tecnología por la transformación del arte en la actual era digital. Ello permite el desarrollo de nuevas habilidades técnicas de los artistas y además, introduce nuevos paradigmas sobre la diversidad. Es así como la modalidad NFT es un mercado digital que da bienvenida a la diversidad desde la oportunidad de participar con su identidad, con el fin de fortalecer las bases de este sistema cultural y económico.
