Tras la pandemia, las patologías de salud mental se han acrecentado llamando la atención de instituciones y gobiernos. Una de las más generalizadas es la ansiedad.
El portal web de la Biblioteca Nacional de Medicina, MedlinePlus define la ansiedad como “un sentimiento de miedo, temor e inquietud. Puede hacer que sude, se sienta inquieto y tenso, y tener palpitaciones. Puede ser una reacción normal al estrés”. Estos sentimientos y reacciones físicas se hacen cada vez más habituales con el acelerado estilo de vida que exige nuestra sociedad actual y los altos niveles de estrés que esto conlleva.
En efecto, las características de la atípica situación que supone la pandemia por el Covid-19 ha generado un incremento en los trastornos de salud mental, incluyendo la ansiedad. Podemos evidenciarlo al ver el informe científico publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el pasado marzo, donde afirma que “en el primer año de la pandemia de COVID-19, la prevalencia global de ansiedad y depresión aumentó en un 25 %”.
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Por su parte, la Alianza Nacional de Salud Mental, afirma que las personas LGBTQ tienen casi tres veces más riesgo de sufrir trastornos de salud mental como ansiedad, depresión y trastorno de estrés postraumático. Esta es una realidad para las personas diversas que tienen que enfrentar la discriminación y el abuso.
¿Cómo afecta la ansiedad a las relaciones LGBT?
La ansiedad no se limita a un sentimiento individual, sino que afecta otras esferas de la vida, incluyendo las relaciones interpersonales. Cuando se sufre de ansiedad, es probable que estar en una relación de pareja, genere más ansiedad y se abre la puerta para una serie de pensamientos negativos, miedos y preocupaciones.
Por ejemplo, se teme perder al amor que costó conseguir y padecer el abandono, también pensamientos como “que no eres suficiente» aparecen de repente en la mente. A esto hay que sumarle los prejuicios que existen por ser LGBT y lo que ello trae consigo, haciendo que llevar relaciones sanas y satisfactorias sea más complicado.
La ansiedad que puede despertarse dentro de una relación de pareja puede ser por causa de la misma persona que la padece o provocada por su pareja. Según el portal web Psicología Nafría entre las razones que pueden generar ansiedad dentro de la relación están la “inseguridad en nosotros mismos, problemas en el trabajo, una experiencia traumática del pasado e incluso la genética o nuestros hábitos de vida”. Por lo tanto, es necesario trabajar primero en la salud mental propia y recurrir al apoyo de un profesional si se requiere.
En el segundo caso, que sea la pareja quien provoca la ansiedad en la relación, la Psicóloga sanitaria y Neuropsicóloga, Patricia Nafría Vicente recomienda en su blog Psicología Nafría gestionar la dependencia emocional. Para conseguirlo se puede establecer círculos de amigos fuera de la relación, dedicarnos algo de tiempo a nosotros mismos o buscar alguna afición nueva; el trabajar juntos para superar la ansiedad y usar la comunicación como aliado también es recomendable. Sin embargo, es necesario ver la situación con una perspectiva más amplia y evaluar qué tan conveniente es permanecer en la relación, la ansiedad a veces es un síntoma de que la relación no va por buen camino.
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La psicóloga y la fundadora de InterCultural Psychology, Silvana Byrne describe pautas para superar la ansiedad dentro de la relación en su website, destacando la importancia de mantenerse ocupado, desviando la atención de las inseguridades sobre la relación a actividades que te entretengan; evitar el control, dejando fluir con espontaneidad la relación y libertad a la pareja; y sobre todo evitar la autocrítica, en lugar de reprenderte “presta atención a tus sentimientos que están alimentando tus miedos y pregunta, buscando pensamientos más positivos y motivadores” afirma la autora.
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