El mundo de las ciencias se encuentra de luto tras la partida de una mujer que dedicó su vida a ser referente en la microbiología. Ángela Restrepo Moreno nació en Medellín el 28 de noviembre de 1931 y falleció el pasado 3 de febrero del 2022 a los 90 años en Medellín, cuando su corazón dejó de latir para siempre.
Su legado queda grabado para la historia, pues sus descubrimientos han sido de gran utilidad para los avances médicos y microbiológicos, tanto que se ha ganado el merecidísimo apodo de “La mamá de los científicos”.
Gran cantidad de personas importantes en la actualidad de la microbiología han expresado sus sentimientos con respecto a la muerte de una de las personas más importantes en el campo científico colombiano y latinoamericano. Por ejemplo, Moisés Wasserman, bioquímico y ex rector de la Universidad Nacional, dejó ver sus emociones en la red social Twitter.
Acabo de enterarme de la tristísima noticia de la muerte de la Dra Ángela Restrepo Moreno. Pionera de la ciencia en Colombia, persona de extraordinaria inteligencia y gran bondad. Sus logros son incontables. Nos hará mucha falta.
— Moisés Wasserman (@mwassermannl) February 3, 2022
Así mismo, el ministro de salud, Fernándo Ruiz, se expresó sobre la muerte de la científica colombiana diciendo lo siguiente: “Lamentamos profundamente el fallecimiento de Ángela Restrepo. Investigadora, científica y pionera en el campo de la microbiología en Colombia. El Ministerio de Salud acompaña a su familia y compañeros de la facultad de medicina de la Universidad de Antioquia”.
¿Qué hizo Ángela Restrepo?
Ángela Restrepo Moreno se preparó desde muy joven para participar en el desarrollo de importantes descubrimientos microbiológicos. En 1955 se graduó en el Colegio Mayor de Antioquia, obteniendo el título de Tecnología Médica, siendo una de las pioneras en esta dedicación. Su currículum, según el ministerio de ciencias, muestra una gran experiencia en el campo, tanto en el ámbito de la educación como en estudios.
Luego de obtener su título ejerció en el campo de ciencias y participó en el área de medicina de la Universidad de Antioquia, supervisando las prácticas del departamento de microbiología.
Probablemente, uno de los estudios que se le atribuyen a la científica paisa es el de el Paracoccidioides, un hongo que habita solamente en latinoamérica, y al tener contacto con los humanos produce paracoccidioidomicosis, la cual muchos médicos solían confundir con la tuberculosis por sus similitudes de síntomas.
Restrepo descubrió que esta enfermedad afecta principalmente a los agricultores, y que existen alrededor de cinco especies en toda latinoamérica, como la especie brasiliensis o la Paracoccidioides restrepiensis, la cual es una especie que sus alumnos bautizaron y registraron en su honor.
Lleva su sello en la esencia de la Corporación para Investigaciones Biológicas (CIB), un espacio donde científicos de diversas partes del mundo discuten temas relacionados con las bacterias y micobacterias, biología celular, biodiversidad y biotecnología vegetal. Ángela Restrepo hizo parte de los inicios de esta corporación y es por eso que, hasta la fecha de su defunción, llevó consigo el amor por este proyecto.
Mujer, colombiana y científica
Durante 1993 y 1994 se desarrolló, por parte de la Universidad de Antioquia y el ministerio de salud de Colombia, la Misión de Ciencia, Educación y Desarrollo, mejor conocida como la Misión de los Sabios, una iniciativa que buscaba «aportar a la construcción e implementación de la política pública de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación y a las estrategias que debe construir Colombia a largo plazo, para responder a los desafíos productivos y sociales de manera escalable, replicable y sostenible».
Para desarrollar dicha misión se contactaron 47 especialistas de diversas ramas de la ciencia. Era notable la clara ausencia de mujeres, pues de las 47 personas invitadas, 46 eran hombres; es así como Ángela Restrepo se convierte en la única mujer en pertenecer a la Misión de los Sabios. No fue cualquier logro, pues junto con personalidades de la talla de Carlos E. Vasco, Rodolfo Llinás y Gabriel García Márquez puso una semilla para un cambio en los modelos de educación y desarrollo que afrontaría Colombia en los siguientes años.
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Durante su vida encontró limitaciones para ser una mujer que se dedicara a tomar decisiones sobre su propia vida y que estas se “salieran del molde” que ya había establecido, ella recordó para una crónica cómo tuvo qué vivir con una sociedad conservadora: “Fue difícil porque en mi época no había sino dos opciones: o te casas o te vas de monja. Una persona que quisiera estudiar algo relacionado con la ciencia era inusitado, aunque mis padres me apoyaron porque al fin de cuentas era lo único que quería y había que darle gusto a la muchacha”, dijo la científica.
No solamente pudo ser objeto de críticas por el hecho de que fuera mujer, sino además de que era hija única, de que era soltera y de que la carrera que eligió era una carrera considerada una carrera mal remunerada; lo que en una sociedad como la colombiana, en ese entonces, la convierte un blanco perfecto para las malas lenguas. Como docente, dedicó parte de su vida a cambiar estos pensamientos en las personas.
“Quisimos invitar a los jóvenes que ya decidieron que su camino de vida está en la ciencia para que les narren a los estudiantes cuál ha sido su batalla y cómo fue que se decidieron a hacer todos los sacrificios del mundo por escoger, entre comillas, una profesión que no tiene un estatus muy importante dentro de la sociedad, y que nunca los hará ricos”.
El trabajo de Ángela Restrepo estará guardado para la historia como uno de los más importantes para el desarrollo de la ciencia latinoamericana. Durante su vida recibió muchos premios y reconocimientos que reafirman el excelente trabajo al cual se dedicó en su día a día. Vivió dando lo mejor de sí, para que nuevas generaciones de médicos y microbiólogos puedan seguir aportando a una mejor salud y a una mejor educación.
“Nunca me angustié de ser una mujer soltera por la multiplicación de los científicos que he visto crecer a mi lado”.