Desde el año 2021, hemos protagonizado una especie de espejismo de igualdad. Los derechos de las personas LGBT no están garantizados cuando se dan pasos atrás en la legislación. Las noticias reflejan un apunte de la diversofobia. Además, se han recortado derechos que ya se habían conquistado.
El giro a la derecha y la pérdida de derechos
En nuestro entorno circundante, estamos viendo cómo en varios países donde parecía haber cierta seguridad en la vida de las personas LGBT, se ha comenzado a retroceder.
En el mes de marzo se aprobó en Florida la ley Don’t say gay, que prohíbe hablar de diversidad en el sistema educativo hasta la escuela secundaria. Se vuelve ilegal hablar de cuestiones de género y orientación sexual a menores, con represalias para el profesorado que lo haga.
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En Alabama, además, se han aprobado anteproyectos de ley que impediría a menores trans usar el baño de su género sentido. Además, se prohíbe hablar de sexualidad e identidad de género hasta quinto grado.
Hasta marzo, 13 estados incluyendo Alabama, empezaron a considerar aprobar leyes para impedir la atención en temáticas de género a adolescentes trans, lo que se traduce en una socavación de sus derechos de manera directa. Además, esto tendría una fuerte repercusión en su calidad de vida y salud mental.
En Florida, además, se aprobó una ley que impedía a las mujeres trans participar en el deporte femenino. También se prohibió hablar de género y orientación sexual en primaria.
En Europa, es conocida la situación de retroceso en derechos LGBT que se está dando en Polonia y Hungría. En este último, el presidente Viktor Orbán ha estado durante los últimos años reformando la constitución y leyes para prohibir el matrimonio igualitario. Se deja de considerar familias a las uniones LGBT y se prohíbe hablar de este tema a menores. Además, las identidades trans quedan ilegalizadas.
En España, hemos visto cómo los partidos de ultraderecha felicitaban las políticas de Orbán y sus medidas en contra de los derechos humanos. Además, ponían a estos países como modelos a seguir por ir «en contra de la ideología LGBT»
España y el pin parental
Uno de los partidos que más daño está haciendo en la difusión de los discursos de odio contra el colectivo LGTB es Vox. Es el responsable de impulsar medidas como el llamado Pin Parental, con arraigo en lugares como Murcia, donde sí está aprobada. Su objetivo es que el alumnado no pueda recibir charlas sobre violencia de género o diversidad afectivo sexual si no tienen una autorización expresa de los padres.
La medida del veto parental surge a raíz de la presencia de charlas en institutos sobre violencia de género o educación afectivo sexual. Charlas impartidas por profesionales que vienen a cubrir las conocidas carencias del sistema educativo español en lo que a este tema se refiere.
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Es importante resaltar que el PIN parental es una medida que además va en contra de:
- El artículo 1 de la LOMCE, donde se refleja la educación integral del alumnado.
- Las leyes de violencia de género.
- Las leyes LGTBI autonómicas que establecen que la educación complementaria es obligatoria. Además, aseguran una formación para que los menores no se conviertan en futuros agresores por motivo de odio. También mencionan que los profesionales deben formarse en estos temas, aunque estas son medidas que apenan se cumplen.
Hay una estrategia clara contra los derechos de las personas LGTB. Con miles de agresiones de odio anuales y leyes que no se cumplen, los partidos conservadores hacen campaña para eliminar esas leyes que tanto ha costado conseguir.
Bulos contra el colectivo LGBT
Entre las mentiras que más se han difundido contra las personas LGTB, principalmente por partidos políticos conservadores, encontramos por ejemplo que:
- Son un lobby con intereses económicos (el mito de las paguitas).
Este argumento es usado por grupos de ultraderecha para justificar la criminalización del colectivo. Se reafirma de este modo en su postura contraria a los derechos LGBT. - Reciben muchas ayudas innecesarias.
Es fácil posicionarse en contra del colectivo si ve peligrar otras cuestiones económicas como las pensiones de las personas mayores. Este mito no solamente ha sido desmentido por ser falso, sino que es al revés. El Partido Popular ha aumentado las ayudas a la tauromaquia, con menor inversión en ayudas para la organización del orgullo. - Comparar LGBT con pederastia.
Es un argumento poco original que se ha utilizado durante siglos para justificar el recorte de derechos. Es algo que ya veíamos en época franquista (recordemos que la ley de vagos y maleantes estuvo activa hasta 1995). Parece que esta idea falsa ha vuelto, aunque ha sido ampliamente desmentida. Además, quienes tienen un mayor riesgo de sufrir abusos en la infancia son las niñas, porque la mayoría de agresores son varones heterosexuales. - Los menores van a recibir charlas sobre sexo no adecuadas para su edad.
Ha sido frecuente la difusión de bulos con vídeos y audios falsos sobre este tema. No solamente ha sido desmentido, sino que las charlas sobre diversidad siempre están adaptadas a las edades a las que se dirigen. - Se quiere obligar a los menores a hormonarse.
Esto precisamente es un requisito que la ley trans quiere eliminar. No todas las personas trans quieren o pueden someterse a un proceso de hormonación. Y quienes pasan por ello, no deberían tener que hacerlo como una obligación. - Son una minoría y no hace falta legislar para ellos.
Este argumento para deslegitimar la lucha por los derechos LGTB va directamente en contra de la realidad que nos muestran las estadísticas. Un estudio de Ipsos Mori estima que, entre la generación Z, el 66% sería cisheterosexual (34% LGTBQIA+). Y en la millenial, la población que no es cishetero sería un 29%. Esto sin contar a las personas que no han salido del armario. En cualquier caso, aunque realmente fueran pocas personas, no es justificación para no proteger sus derechos.
Los peligros de la derecha
Ante las terribles declaraciones de partidos como Vox, y que están teniendo calado en la sociedad española, encontramos las siguientes:
‘’Los homosexuales pueden tener una unión civil, pero no matrimonial, eso es la unión entre hombres y mujer”.
“A la hora de adoptar, debería tener preferencia la unión de un hombre y una mujer. Si hay un niño al que no le quiere nadie y lo van a adoptar dos homosexuales, yo los aplaudo. Pudiendo elegir, es preferible que esté con un padre y una madre”.
“Con el tema de los gays hemos pasado de que las relaciones homosexuales estuvieran prohibidas, perseguidas, incluso penadas, a que estuvieran más o menos toleradas, luego aceptadas con toda naturalidad y ahora están siendo promovidas y lo siguiente es que sean obligatorias”.
“Si realmente se quiere defender a los niños no hay que defender a los niños homosexuales, si es que existe semejante cosa, o los niños trans. Hay que defender a todos”.
«¿Por qué los gays celebran tanto el día de San Valentín si lo suyo no es amor, es solo vicio?».
«Es un error prohibir que los homosexuales acudan a terapia que les ayude a encontrar su identidad».
«Si mi hijo dijera que es gay, trataría de ayudarle. Hay terapias para reconducir su psicología”.
«Somos partidarios de quitar la bandera de los gays y las lesbianas. Porque cada uno, su orientación sexual en su casa y en su cama».
“El Orgullo Gay lo mandaremos a la Casa de Campo. Causan verdaderos problemas”.
Lo que aún queda por conseguir en el año 2022
Debemos luchar para que se cumplan las leyes de reafirmación LGBT autonómicas. El 2021 se convierte en el primer año que estamos viendo un fuerte retroceso y ataque a los derechos LGBT en el plano legislativo.
La ley LGBT de Madrid estuvo a punto de ser derogada, y sigue en riesgo de ser atacada o modificada. Artículos como los de la educación inclusiva o la atención a las víctimas de violencia podrían desaparecer. Respecto a la Ley Trans, no solamente se está ralentizando el proceso, sino que ha abierto la puerta a la transfobia más feroz al no tener blindados sus derechos.
En el 2021, un joven de 24 años llamado Samuel de 24 años fue asesinado al grito de ‘’maricón de mierda’’. Esto es solo una parte visible de lgtbfobia que sigue existiendo, y que ha aumentado en los últimos años con la normalización en las esferas políticas de los discursos de odio.
En Castellón incluso vimos la orden judicial para retirar libros de las bibliotecas y los institutos todos los libros relacionados con las realidades LGBT. Un intento de borrar la existencia de la diversidad.
Partidos como Vox no solamente han lanzado declaraciones abiertamente homófobas, sino que han mostrado una absoluta falta de compromiso en la lucha contra la discriminación por motivos de orientación sexual o identidad de género.
Las terapias de conversión siguen existiendo en España. En Murcia, además, fue polémico el caso de un ginecólogo que diagnosticó como enfermedad la homosexualidad en octubre de 2021.
No podemos dar pasos atrás
El odio promovido por el ascenso de determinados partidos políticos nos tiene que hacer reaccionar como sociedad. Cada año, aumentan las agresiones al colectivo LGBT e incluso se está intentando modificar leyes que protegen sus derechos.
La discriminación contra las personas LGBT es real en el campo de la educación, la sanidad o las fuerzas de seguridad. Esto hace peligrar las vidas de las personas. Con el personal sanitario que no sabe cómo atender a una persona trans. Con fuerzas de seguridad que no toman iniciativa ante un delito de odio. Con un profesorado que no penaliza el acoso por una expresión de género. Desde las propias instituciones peligra la seguridad de las personas.
Contra el miedo, necesitamos unidad, cuidarnos, respuestas y no dar ni un paso atrás. Es necesario el compromiso social por la igualdad y una lucha activa contra la discriminación. Urge educarnos como sociedad y asegurar los derechos de todas las personas para poder vivir en paz y libres de violencias.