Paul B, Preciado es un filósofo, escritor y activista por los derechos de la comunidad LGBT de nacionalidad española. Es uno de los referentes más importantes de la teoría del género y la teoría queer en lengua española, por lo que se ha convertido un referente para los críticos del género y los filósofos postestructuralistas del nuevo siglo.
Paul B. Preciado: Una irrupción en la lengua
Preciado inicialmente estudió teoría de la arquitectura en la universidad de Princeton, donde consiguió una Beca Fulbright, con la que cursó un máster en Filosofía Contemporánea y Teoría de Género en New School for Social Research de Nueva York.
Esto fue revelador para Paul B. Preciado, de acuerdo con lo que él mismo cuenta, pues cuando llegó a New York —en los años 90— los movimientos feministas, los movimientos de activismo LGBT, así como el pensamiento Judith Butler estaban en auge. Esto fue muy importante porque le permitió acercarse a colectivos lésbicos que nutrieron su propia producción intelectual; no obstante, no solo su pensamiento sino su praxis en el mundo.
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Durante años publicó bajo el nombre “Beatriz Preciado”, hasta que en 2014 revela su enunciación como hombre trans y hace su cambio de nombre a “Paul”; este proceso lo ha trabajado tanto en sus seminarios como en sus libros, pues estos están atravesados también por el cuerpo, la teoría del género y de las ideas de Judith Butler. Además, bebe de otros filósofos como Jacques Derrida —de quien fue alumno—, Michael Foucault, Ágnes Heller, entre otros.
Ha trabajado como profesor de la Universidad de París VIII y la Universidad de New York, así como también fue director del programa Somateca: feminismos, producción biopolítica, prácticas queer y trans del Museo Nacional Reina Sofía.
Esto se desencadena con que es un pionero de la teoría de género en lengua española, de acuerdo con las propias declaraciones en la presentación de su último libro: “Era una propuesta disidente porque mis libros no tenían ni público ni lectorado”.
Lo que demuestra esto es la necesidad —que él identificó— de encontrar un lugar dentro de la academia para pensar estos temas y de ahí surge su catálogo de libros que se presentarán a continuación, es necesario notar que hacer una reseña de las obras de Paul B. Preciado es una tarea muy difícil en tanto cada una amerita su propia investigación.
Es el primer libro que publica (2000), en este se demuestra la influencia que tiene la deconstrucción propuesta por Derrida en su pensamiento: el libro deconstruye el mundo en relación con la sexualidad y, puntualmente, la relación que se ha establecido entre los órganos sexuales, el género y la construcción de la identidad alrededor de esto.
Esto se problematiza a partir de un diagnostico del mundo y una crítica de las convenciones hetero cis patriarcales, con lo que se reivindican las orientaciones sexuales disidentes y las identidades que transicionan, pues se propone la eliminación de lo “masculino” y lo “femenino” como oposición y propone que cada persona se enuncie desde un lugar realmente propio.
Los órganos sexuales, además, se proponen como órganos “productores”, lo que da cuenta de la forma en la que el mundo se ha configurado para que estos órganos producen realidades, por lo que se señala las excepciones —la intersexualidad— como un sujeto que pone al sistema en problemas para clasificarla y, por lo mismo, son cuerpos anti sistémicos.
Este libro se ha convertido en una fuente fundamental de la teoría queer y del género en español y es considerada una de las obras filosóficas más importantes del siglo XXI.
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Este libro es un híbrido que mezcla la autobiografía y el ensayo filosófico —lo que demuestra la relación que hay para Preciado entre el pensar y el existir—, pero además establece conexiones puntuales entre la experiencia y el pensamiento filosófico.
La parte anecdótica se demuestra en dos vías: en la primera el autor cuenta su experiencia con el autosuministró de Testogel (testosterona en gel); la segunda, por otro lado, cuenta el inicio de su relación sexo-afectiva con la también escritora Virgine Despentes. Lo que se complementa con una reflexión del autor sobre su automedicación y la industria farmacéutica, lo que le permite extenderse a la biopolítica para hablar sobre la relación de sujeción de los cuerpos con los medicamentos (y la industria que los produce).
Por esto mismo, su experimentación con el Testogel se aborda como un grito de rebeldía en contra de una sociedad que delimita los cuerpos a un ‘deber ser’ con el que no se está de acuerdo. En este libro, además, se hace una crítica a algunos movimientos feministas que perpetúan las relaciones de dominación sobre el cuerpo “femenino” con discursos del ‘deber ser’.
Citando lo que menciona el mismo autor sobre esta obra, este no es un tratado filosófico, sino que son, de acuerdo a la misma obra: “crónicas, textos en su mayoría escritos en aeropuertos y en habitaciones de hotel, que escribí para el periódico francés Libération y para algunos otros medios europeos entre 2010 y 2018”.
En este libro Preciado continúa con su planteamiento sobre la deconstrucción del cuerpo y la forma en la que el agenciamiento que se hace de este puede expandirse hasta quebrar las convenciones del sexo y el género.
Es importante mencionar que esta es la primera obra que el autor publica después de su transición, y la influencia de este proceso es clara, de acuerdo con lo escrito por Preciado en la obra en la página 25: “Mi condición trans es una nueva forma de uranismo. No soy un hombre. No soy una mujer. No soy heterosexual. No soy homosexual. Soy un disidente del sistema sexo-género”.
Este libro profundiza en el proceso de transición de Preciado y por lo mismo es importante leerlo desde ahí, la obra se puede leer desde la transitoriedad de las fronteras en las que el autor usa Urano como metáfora de un lugar en el que la taxonomía social es eliminada.
Este libro publicado en 2020 parte del discurso presentado por Paul B. Preciado en L’ecole de la Cause Freudienne, en donde no pierde la oportunidad para increpar y cuestionar a los asistentes sobre la forma en que el psicoanálisis ha estudiado a las disidencias sexuales.
Esto demuestra la forma en la que durante años el psicoanálisis ha servido a la opresión del sistema patriarcal, y Preciado los cuestiona si van a seguir haciéndolo de esta forma; o bien, puede sumarse a la oleada de pensadores del nuevo siglo que están buscando nuevas formas de enunciar y nombrar estas experiencias que escapan al orden hetero patriarcal.
En este libro el autor demuestra sus conocimientos en psicoanálisis y, lo que es más, presenta una firme voluntad de construir conocimiento en este campo.
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En esta obra el autor confronta a dos sujetos que como graduado de arquitectura conoce muy bien: el ser humano y la arquitectura. Así, el autor usa el ejemplo de la Mansión Playboy para demostrarlo como un estandarte de la reafirmación de la masculinidad moderna en tanto la forma en la que está construida la casa tiene una finalidad específica: todo funciona como un centro de exhibición multimedial en el que todos (incluido Hugh Hefner) son parte de un espectáculo aspiracional.
Esto propicia unas configuraciones corporales que no son naturales, por ejemplo, las siliconas; pero, al estar al servicio del placer, son aceptables e incluso obligatorias. Por tanto, retoma su idea de las relaciones de sujeción médicas que había trabajado en Testo Yonqui, con la diferencia de que aquí la tecnología es protagonista, pues de nada sirve tener las puertas cerradas, si se tienen las redes tecnológicas abiertas.
Este es el último libro publicado por Paul B. Preciado a la fecha, escrito en el contexto de la pandemia del covid-19 y que trabaja sobre este mismo. El autor ofrece una reflexión sobre el capitalismo —y lo que podría ser un final de este mismo—, en el que se identifica este como una potencialidad peligrosa —especialmente ahora que se podría considerar que está moribundo—. Por tanto, postula al Covid como algo provechoso para al poder pues funciona como un medio para controlar a la población.
Así pues se adentra en el campo de la geopolítica y establece conexiones entre la pandemia del Covid-19 y la pandemia de VIH de los años 90 en Estados Unidos —la que conoció bien pues vivió esta época en carne propia—. Además, Preciado aprovecha para postular en este libro una idea que podría ser revolucionaría: dejar de pensar en las personas trans a la luz de la dismorfia, porque esta no es una enfermedad, sino una zona gris en la que se escapa del sistema.
