Sin temor alguno a los cambios, Cristina Chacón Santa ha tenido una fructuosa carrera profesional en la que se ha retado en distintas facetas, ha potencializado varios talentos y descubierto pasiones, entre ellos, el activismo en el metaverso.
Hablamos con Cristina Chacón sobre cómo llegó al mundo de los NFTs, el metaverso y su activismo trans en el entorno digital.
¿Quién es Cristina Chacón?
Esta mujer con experiencia de vida trans nació hace 26 años en Aguachica, Cesar, y desde hace 10 vive en Medellín, donde estudió Comunicación Social y Periodismo en la Universidad de La Salle. Aunque al principio parecía que esta carrera iba a definir su destino laboral, ella se permitió buscar motivaciones más satisfactorias, que hoy la tienen disfrutando con vehemencia la industria tecnológica en el cargo de directora de marketing y relaciones públicas para MetaDolls NFT.
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Chacón Santa confesó a every LGBT que el periodismo “nunca” le interesó y que una vez lo ejerció terminó por descartarlo. “Me desencanté”, expresó.
Tuvo el primer acercamiento a esta profesión mientras la estudiaba. La radio fue su puerta de acceso al mundo del periodismo y luego asumió el desafío de escribir.
“Desde el primer semestre de la carrera de Comunicación Social trabajé en una emisora digital que era muy famosa en Medellín. Duré un año allí y luego empecé a hacer parte de medios de comunicación como columnista: escribí en Pulzo, Al Poniente, La Oreja Roja, y en un periódico comunitario de la ciudad”, explicó Cristina.
Fue en 2018 cuando su vida dio uno de esos giros inesperados pero certeros que le permitió comenzar a trazar un camino profesional en el que se sintiera más cómoda y creativa.
“Se me dio la oportunidad de irme a hacer un intercambio académico a la Universidad Católica de Brasilia, una de las más reconocidas de Brasil y toda Sudamérica, para ampliar mis conocimientos en publicidad, relaciones públicas, marketing y branding. Me desencantó el periodismo, pero me empezó a enamorar la publicidad y el marketing, de cómo se construyen las marcas”, contó a every.
“Después de un año regresé a Colombia e ingresé a un curso gratuito que promovió una fundación sobre automatización y programación de unos robots. Ahí conocí un poco de la tecnología y me gustó mucho. Descubrí que la tecnología no necesariamente era algo súper lejano e imposible de entender”, agregó.
Una vez en Colombia decidió tomar un rumbo distinto al que seguía antes de irse a Brasil. Ahora su trabajo se empezó a enfocar en liderar las estrategias de publicidad y marketing de varias compañías, entre esas Rappi, donde se encargó de proteger la marca en entornos digitales en los países en los que tiene presencia.
“En la pandemia (de la covid-19) salí de Rappi y creé mi propia marca de ropa. Ya tenía la ventaja de que entendía de todos estos conceptos sobre cómo construir una marca, qué es lo que las personas están esperando de las marcas y demás. Mi marca se llama ‘Soy livre’ y tiene un contexto a favor de los derechos de la población LGBTIQ+, de la mujer y del fin del racismo”, dijo.
En 2021 obtuvo su título universitario y fue nombrada como relacionista pública del Festival El Dorado, uno de los eventos de publicidad más importantes de Colombia.
“Gracias a ese trabajo, los vicepresidentes de la agencia de publicidad más importante del país se interesaron en mi trabajo e hice con ellos una consultoría sobre relaciones públicas y sobre inclusión en espacios laborales”, sostuvo.
¿Cómo entró al mundo de los NFTs y el Metaverso?
Después de esta valiosa experiencia volvió a encontrarse con la industria tecnológica. Le hablaron sobre un proyecto de NFTs y no quiso resistirse.
“Yo ya conocía de NFTs gracias al Festival El Dorado porque recomienda cada año unos caminos que deben tomar las marcas o las agencias con relación a las nuevas tendencias y la tecnología, entonces hace un poco más de un año conocí NFTs, metaversos y me empecé a interesar mucho porque yo ya venía del mundo del marketing, del iCommerce, de la venta”, indicó Cristina a every.
Explicó que los NFT (token no fungible) “no son más que una propiedad digital y lo que te aseguran es que tú eres realmente dueño de algo. Es una propiedad que está basada en tecnología blockchain”.
Actualmente se desempeña como directora de marketing y relaciones públicas para MetaDolls NFT, la primera tienda de tatuajes en el metaverso.
“MetaDolls NFT es la primera colección colombiana y una de las pocas latinas que ingresa a crypto.com, que es el segundo Exchange de criptomonedas y NFT más grande del mundo, tiene alrededor de 50 millones de visitas mensuales y las personas ingresan desde 90 países. Es maravilloso poder estar trabajando aquí”, añadió.
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Detalló que “esta es una colección de miles de muñecas y lo que se logra es que tú compras la muñeca y cuando ya esté construida la tienda de tatuajes vas a entrar en un sorteo entre las personas que compraron y recibir el 10 o 15 por ciento, entras mensualmente a un sorteo de lo que se vaya a hacer en la tienda de tatuajes”.
“Lo que nosotros queremos con esta colección es crear la primera tienda de tatuajes en el metaverso. Así como nos gustan los tatuajes en el mundo físico vamos a querer también tatuarnos en el metaverso, pero para poder crear eso se necesita un músculo económico, entonces los NFTs sirven como una forma de captar dinero y poder crear los proyectos que queramos”.
Contó además que la idea de este proyecto fue creada por Alejandro Rincón hace siete años, cuando estaba estudiando artes plásticas en Cali.
“En su proyecto de grado él quería enviar una crítica social frente a la homogeneización de los cuerpos femeninos y frente a la prisión en la que se convierten muchas veces nuestros cuerpos. Entonces le pareció muy interesante empezar a tatuar muñecas, a ponerles piercings, a cambiarles el cabello. Esto empezó con obras de arte”.
Hace un año Rincón decidió retomar el proyecto, pero esta vez en el mundo digital y sumar a su equipo a Cristina Chacón, quien desde que llegó se siente en el lugar indicado.
“Estoy muy feliz, me encanta poder transformar las cosas, me encanta poder ayudar a las marcas y a las empresas a construirse desde la relación con las personas. Yo siempre he sido demasiado sensible, demasiado humana, muy empática, tal vez porque yo en muchos momentos he sufrido de discriminación, de represión, culpa de la forma en la que nos han educado. Entonces cuando veo que las personas se pueden conectar con las marcas de una manera genuina, cercana y asertiva a mí me emociona el corazón”, expresó emocionada.
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Agregó que aunque antes de conocerlo tenía muchos prejuicios alrededor de lo que representaba el marketing, pues pensaba que solamente se trataba de vender cosas “que muchas eran mentira”, ahora lo ve como una manera de cambiar el mundo.
“El marketing me permitió entender que también se puede hacer política y activismo, que también se puede transformar el mundo desde las marcas y empresas. Eso es realmente lo que a mí me apasiona”.
Así mismo percibe al metaverso, como un mundo virtual en el que se pueden realizar valiosas acciones a favor de distintas causas. Según apuntó:
“Yo siempre digo que no hay nada más trans que el metaverso porque tú puedes verte hoy como quieras, tener el nombre que quieras y allá te lo puedes cambiar. Creo que el mundo, la naturaleza y los seres humanos somos muy diversos y tenemos la oportunidad de conocer el mundo a través de los otros”.
Lamentó que un importante porcentaje de personas trans vean obstaculizados sus proyectos de vida por la discriminación e invisibilización, aunque aclaró que ella no ha sufrido “desprestigio” de su trabajo por su identidad de género.
“Yo no quiero ser ni la primera ni la última, quiero ser una de muchas que tenga el poder y la libertad de estar donde quieran estar, ser lo que quieran ser, trabajar en lo que quieran trabajar, sin que sus vidas y su forma de vivir les cierre las puertas”.
“También deseo que los espacios laborales sean saludables para las mujeres, la población trans, los hombres, las personas negras e indígenas”, concluyó en su conversación con every.
