¿Cómo comenzar a meditar?

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Guía para comenzar a meditar

Seguramente muchas veces has escuchado que meditar es muy útil para muchas cosas, como reducir el estrés, el cansancio, o la angustia, y esto es verdad. Muchos estudios han comprobado que la meditación es demasiado beneficiosa para nuestro bienestar, al punto que hoy en día se practican en muchas empresas.

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¿Qué es meditar?

La revista Glamour utiliza el libro “Meditación Para Urbanitas” para explicar qué es la meditación: “En sus múltiples variantes, es un ejercicio que compete a varias partes del organismo y que ayuda a conectar lo físico con lo mental para poder alcanzar un enfoque equilibrado, y por lo tanto positivo, de la vida”.

Así, podemos entender la meditación como un entrenamiento mental que nos ayuda a desarrollar nuevas características como persona y a evitar la tensión física o emocional.

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¿Cómo comenzar a meditar?

La meditación se logra colocando el cuerpo en comodidad (incluyendo la ropa y la posición en la cual se vaya a hacer la meditación), puedes acostarte boca arriba, estira tus brazos a lo largo del torso con las palmas de la mano mirando hacia el techo; también puedes sentarte con la espalda recta o acostarte de lado, es tu decisión.

Una vez que encuentres la posición, vas a comenzar a liberar la tensiones de tu cuerpo, comienza por los pies, luego pasa a las piernas, las manos, los glúteos, el torso, los brazos, los hombros y por último los músculos de la cara. Intenta liberar la mandíbula, el cuello y los párpados, que son generalmente las partes de la cara que están siempre en tensión.

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Una vez hayas liberado todo el cuerpo vas a profundo, vas a sentir como el aire entra a tus pulmones y llena tu diafragma; exhala hasta que hayas vaciado todo el aire. Inhala nuevamente, vas sentir el aire recorriendo por cada pequeña parte de tu cuerpo, desde los pies hasta la cabeza; exhala, puede ser por la boca o por la nariz.

No te preocupes si tu mente se distrae, es algo completamente normal, intenta retomar el enfoque de la meditación, vuelve a respirar. En este punto puedes comenzar a atraer a tu mente pensamientos positivos que te ayuden a trabajar en tus emociones y tu autoestima.

Puedes acompañar esta actividad con sonidos del medio ambiente, música relajada o sonidos de mantras (una sílaba repetida constantemente, por ejemplo, el famoso «Ooooooommm».

¿Con qué frecuencia hay qué meditar?

Los estudios recomiendan hacer cada sesión mínimo de entre 10 a 15 minutos al menos una vez al día. Esto será suficiente para mantener un flujo de aire que genere la serenidad y la tranquilidad que nuestro cuerpo necesita.

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En este punto, sería ideal que adaptemos esta práctica a nuestra cotidianidad, pues controlar el consumo de aire hace que aumente la oxigenación en nuestro cuerpo, algo de lo que los sistemas hormonales, vasculares y musculares de nuestro cuerpo estarán agradecidos.

Adicionalmente, en conjunto con la práctica de la meditación puedes incluir otras prácticas como el mindfulness, la trascendencia, los ejercicios de zen, el vipassana, entre otras.

Herramientas para principiantes

Si apenas estás comenzando y no logras concentrarte a la hora de hacer tu meditación, aquí te dejamos algunas recomendaciones:

  • Adecúa el espacio: Mira que el espacio en el cual vas a realizar tu actividad no esté desordenado ni sucio, intenta que el lugar en el cual te acuestes o te sientes sea cómodo y te permita mantener la posición que deseas.
  • Aléjate de factores que te desconcentren: Intenta no estar cerca de lugares con mucho ruido o con ventanales grandes abiertos. Evita hacerlo en el exterior a menos que sea un lugar sólo y calmado.
  • Realiza meditaciones guiadas: Unas de las mejores herramientas para los principiantes en la meditación son las guiadas. Aquí te dejamos algunas recomendaciones.

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Fuentes:

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