La industria cultural acoge cada vez más a la comunidad LGBT, incluyendola en sus historias y productos. En el caso del cine, los personajes diversos y sus historias se hacen más visibles en la pantalla, generando espacios de inclusión y representación. El cine retrata la vida misma y nos acerca a las realidades del otro. De igual forma, la ficción muestra las historias de personajes LGBT con inseguridades y aspiraciones.
En Anne+: la película (2022), encontramos estos personajes diversos y complejos con los que cualquiera se puede identificar. El largometraje expone puntos como el proceso de conocerse a uno mismo, el apoyo que representan los amigos y la familia en situaciones difíciles; y la representación de personajes queer haciendo de esta película una excelente opción para disfrutar.
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El film producido en Países bajos y dirigido por Valerie Bisscheroux, narra la historia de una mujer queer que se busca a sí misma. La presión de tener que reescribir su libro y mudarse a Montreal por su pareja la hace replantearse cuáles son sus objetivos. Anne, encarnada por la actriz holandesa, Hanna van Vliet se enfrenta a la realidad de que se ha perdido a sí misma en el esfuerzo de complacer a otros, volviéndose dependiente y sin metas propias. Este estado mental se ve reflejado en su escritura, donde la protagonista no tiene propósito.
En el desarrollo de la película, Anne se reconcilia con su sexualidad y se hace consciente de que no es feliz con su pareja y tampoco desea mudarse de país, sino que solo era complaciente. Esta revelación la conduce en un viaje de autodescubrimiento y aceptación.
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La comunicación es primordial para cualquier especie, sobre todo los humanos. Este elemento es tocado en el film destacando su relevancia en las relaciones sociales y para posibilitar expresar nuestras emociones. La protagonista, carente de esta habilidad debe aprender a comunicar de manera asertiva lo que siente y lo que quiere.
En momentos de dificultad el amparo de seres queridos es fundamental. Por fortuna, la protagonista cuenta con un grupo de amigos confiables que la acompañan durante toda su travesía, apoyándola y aportándole cariño. La participación de su familia en el proceso también es clave para su sanación. De esta manera, el largometraje resalta el valor de una red de apoyo para las personas que atraviesan una situación compleja.
Por otro lado, la cinta hace una amplia representación de las personas LGBT. Debido al enfoque positivo hacia las narrativas LGBT de su directora queer, se muestran diversos personajes con matices, empoderados y orgullosos de su sexualidad. La historia los muestra cercanos al público, con vidas comunes, relaciones amorosas, trabajos exitosos y pasatiempos.
Los personajes cuentan una historia política, desde la resistencia que representa ser ellos mismos hasta las acciones transformadoras que pueden generar un gran impacto en la sociedad. En la cinta se hace alusión a los disturbios de Stonewall y el papel fundamental que tuvieron las Drag Queen en él, por ejemplo. También, el que personas LGBT conquisten espacios profesionales y de poder, como se muestra en la película, representa un acto político.
Que el papel protagonico sea una mujer queer y nos cuente su historia es bastante significativo en los medios, visibilizando a la mujer y destacandola dentro de la misma comunidad LGBT donde la masculinidad tiene protagonismo. Historias como estas aportan mucho al pensamiento colectivo resaltando que las mujeres diversas tienen espacio en la sociedad.
El largometraje disponible en la plataforma de streaming Netflix nos deja reflexionar sobre el cuidado y la priorización que nos damos a nosotros mismos. También hacernos preguntas como ¿en qué momento he sido Anne? ¿he cedido en exceso para complacer a alguien más? ¿tengo claros mis objetivos y propósitos?
El viaje de autoconocimiento que emprende la protagonista, el recalco de lo prioritario que es contar con una red de amigos y familiares en situaciones difíciles y la excelente representación de personajes LGBT hacen de esta película un gran acierto.