La homofobia en EEUU, y la LGBTIfobia en general, es algo que marca todavía la realidad del gigante americano. Las diferentes legislaciones presentan un mosaico muy diverso y lleno de matices. Actualmente, incluso hay algunos estados en los que te pueden despedir si eres gay.
Las personas que trabajan en EEUU tienen que hacer frente a esta la realidad del país en cuanto a protección de derechos se refiere. En primer lugar, que no todos los estados se rigen por las mismas leyes. En segundo lugar, que la lgtbfobia aún sigue muy presente y arraigada. A nivel federal, el conjunto de leyes y directrices nos plantea un escenario de entrada bastante peculiar y complejo.
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Los tribunales de justicia americanos
Para luchar por sus derechos cuando son atacados, los trabajadores LGTB estadounidenses pueden ampararse en el título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964. Esta legislación prohíbe que una persona sea discriminada en su lugar de trabajo. Concretamente impide la discriminación por «raza, color, religión, sexo y origen nacional».
En caso de discriminación en el trabajo, es posible presentar una demanda e ir a los tribunales. Sin embargo, el problema de la homofobia en EEUU es que no hay una ley federal que ampare explícitamente a las minorías sexuales.
Para que la demanda sea efectiva, todo gira en torno a la concepción e interpretación del término ‘’sexo’’. Algunos tribunales abarcan una definición más amplia que incluye la orientación sexual y la identidad de género. Sin embargo, otros no tienen esto en consideración. Lo que hace que se den situaciones dispares y existan casos de homofobia en EEUU.
Se han dado casos en los que algunos tribunales se han negado a considerar casos de discriminación laboral. Por ejemplo, lo que le ocurrió a una mujer lesbiana llamada Jameka Evans que perdió su trabajo. En su defensa alegó, como tantas otras personas, haber sido víctima de discriminación laboral a causa de su orientación sexual.
El mapa de la homofobia en EEUU
Pero, ¿de verdad es posible que te despidan en EEUU por tu orientación sexual? ¿Cómo puede pasar esto? Efectivamente es posible. Esto se debe sobre todo al hecho de que, como hemos dicho, no existe una ley que prohíba la discriminación por motivos de identidad, orientación o expresión de género. Por tanto, se abre la puerta a que en cada estado se permitan los despidos.
Un ejemplo lo tenemos en Texas, tradicionalmente conservador. En este estado, no solamente puedes ser despedido por tu orientación sexual, sino que también te pueden obligar a irte de la casa donde vives bajo alquiler. Por tanto, no solamente peligra la situación laboral, sino que esta falta de protección también afecta al ámbito de la vivienda.
El no tener una ley que sea efectiva en todo el país a nivel federal nos deja un mapa de diferencias en relación a la discriminación laboral hacia las personas del colectivo LGTB.
Algunos estados tienen leyes específicas contra la discriminación que protegen a las personas cuanto son atacadas a causa de su orientación sexual. Sin embargo, dejan fuera las cuestiones de género. Personas con identidades de género no binarias, o personas trans quedan fuera del amparo de estas leyes.
De lo 50 estados de EEUU, menos de la mitad cuentan con leyes específicas contra la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género en el ámbito del empleo y la vivienda.
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Por tanto, una persona puede ser expulsada de su lugar de trabajo o incluso de la casa en la que vive por mostrarse abiertamente tal y como es. Esto claramente repercute en su vida y deriva en una mayor presión y miedo a salir del armario en público.
Un estado que no contempla absolutamente ninguna protección para el colectivo LGTB se convierte en motor y respaldo de una discriminación que afecta a un pilar estructural del país: el empleo.
En muchos estados tampoco se actúa para prohibir y perseguir con contundencia prácticas como las terapias de conversión. Tampoco contemplan el cambio de sexo en documentos oficiales necesarios para la vida cotidiana, como el carnet de conducir o los certificados de nacimiento.
Los estados que no prohíben directamente la discriminación LGTB al no contar con legislación especifica son: Oklahoma (OK), Georgia (GA), Dakota del Sur (SD), Alabama (AL), Wyoming (WY). Michigan (MI), Misisipi (MS), Carolina del Sur (SC) y Montana (MT).
El estado de Arizona (AZ) sí que cuenta con una ley que castiga los delitos de odio a causa de la orientación sexual. También permite que las personas puedan cambiar el sexo el documentos oficiales, como el carnet de conducir o los certificados de nacimiento.
California es uno de los pocos estados (7) que cuenta con leyes específicas contra la homofobia en EEUU en todos los ámbitos de la vida cotidiana.
Idaho (ID), Indiana (IN), Ohio (OH), Virginia (VA) y Dakota del Norte (ND) permiten que las personas puedan cambiar el sexo solamente en el carnet de conducir.
Virginia Occidental (WV) permite que las personas puedan cambiar el sexo en el carnet de conducir y certificados de nacimiento.
Louisiana (LA), Florida (FL), Kentucky (KY), Texas (TX), Tennessee (TN) y Nebraska (NE) tienen una ley que castiga los delitos de odio a causa de la orientación sexual.
Carolina del Norte (NC) cuenta con una ley que castiga los delitos de odio a causa de la orientación sexual e identidad de género.
Kansas (KS) tiene una ley que castiga los delitos de odio a causa de la orientación sexual. Las personas pueden cambiar el sexo solamente en las licencias de conducir.
Arkansas (AR) cuenta con una ley que castiga el acoso a les estudiantes por orientación sexual e identidad de género.
Misuri (MO) cuenta con una ley que castiga los delitos de odio a causa de la orientación sexual e identidad de género. Además, permite el cambio de sexo solamente en las licencias de conducir.
Wisconsin (WI) es un caso especial. Cuenta con leyes que persiguen y castigan la discriminación, también en el empleo o la vivienda. Sin embargo solamente abarca la orientación sexual, dejando al margen las cuestiones de género.
Algunos estados tienen excepciones. Por ejemplo, once ciudades de Ohio cuentan con sus propios reglamentos para poder proteger los derechos de las minorías sexuales. En Texas también hay seis ciudades con una actuación similar.
Asimismo, estados como Carolina del Norte ofrecen protección laboral a trabajadores LGTB del ámbito público, pero dejan fuera al sector privado.
Una conquista histórica de los derechos
Para poder entender la situación actual y el mosaico de leyes y regulaciones, podemos echar un breve vistazo a la historia reciente del país y su lucha contra la homofobia en EEUU.
- 1996: en este año, el presidente Clinton firmó la Ley de Defensa del Matrimonio. Así, se negaban beneficios federales a los cónyuges del mismo sexo. Creó una regulación, como excepción a la Constitución de los Estados Unidos, para permitir a que los estados no considere los matrimonios entre personas del mismo sexo que se hubieran celebrado en otros estados.
- 1997: Leslie Feinberg, activista trans, publica Transgender Warriors: Making History from Joan of Arc to Dennis Rodman. Con esta obra investiga y rastrea la historia de las personas trans en todo el mundo, así como la opresión sufrida por este colectivo a lo largo de la historia.
- 1998: el miembro del congreso de Wisconsin, Tammy Baldwin, se convierte en la primera persona abiertamente gay que gana las elecciones para lograr un escaño en el primer mandato del Congreso.
- En el mismo año: un hombre llamado Matthew Shepard es atado a una cerca, golpeado, y asesinado un 7 de octubre. Este incidente deja a mucha gente conmocionada y logra la atención de los medios de comunicación. En parte del mundo se hace eco de lo sucedido.
- 1999: numeroso médicos y profesionales de la salud mentales alzan la voz para defender que la homosexualidad no es un trastorno mental. Por tanto, no puede ser tratada ni curada. Todo esto ocurre en un marco en el que aún estaban muy presentes las terapias de conversión, sobre todo a hombres homosexuales.
- 2000: Vermont se convierte en el primer estado en todo el país en reconocer legalmente las uniones civiles entre hombres homosexuales o entre mujeres lesbianas. La ley establece que estas parejas tendrán derecho a los mismos beneficios, privilegios y responsabilidades que otros cónyuges.
- 2004: Massachusetts legaliza el matrimonio entre personas del mismo sexo. Se convierte oficialmente en el primer estado que lo logra.
- 2008: California se convierte en el segundo estado en EEUU en legalizar los matrimonios entre personas del mismo sexo.
¿Qué ha pasado en la última década?
Los últimos 10 años de nuestra historia reciente cobran un papel relevante en la lucha contra la homofobia en EEUU. Cada estado ha dado pasos hacia adelante en la consecución de derechos LGTB, mientras que otros se han quedado estancados.
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El fin del mandato de Barack Obama y el inicio de la era Tump marcó con fuerza la historia del país en los últimos años, con un auge de la lgtbfobia, pero también de la lucha por los derechos civiles. La organización de la sociedad mediante los medios digitales, así como el ciberactivismo cada vez más fuerte y activo han tenido y sigue teniendo un impacto en la sociedad estadounidense.
La mayor visibilidad del colectivo LGTB se logró con movimientos como el Me Too permitió una profunda concienciación de las nuevas generaciones. Asimismo, la digitalización del trabajo o la llegada al poder de miembros de la comunidad LGTB han sido los factores clave que han tenido impacto e influencia en el desarrollo de leyes estatales.
Sin embargo, EEUU aún tiene la asignatura pendiente de subirse al tren de los derechos humanos y establecer una ley estatal que proteja a todas las personas de la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género. Recordemos que en estados como Florida, en este año 2022 nació el proyecto de ley Don’t Say Gay. El cambio real y efectivo en toda la sociedad estadounidense aún está por venir.