Desde algunos organismos de salud internacionales ha quedado establecido que hasta ahora no existen mayores riesgos para personas embarazadas o en periodo de lactancia que se quieren vacunar.
En muchos países han priorizado la vacunación de personas embarazadas considerando un grupo estratégico en las campañas de vacunación. Ya que se ha demostrado que las personas embarazadas pueden desarrollar un caso severo de la enfermedad comparado con personas de la misma edad que no están embarazadas.
Desde el gobierno de España han sostenido:
En base a los datos disponibles -que no indican ningún efecto adverso sobre el embarazo- y las recomendaciones de otros países, se propone vacunar a las embarazadas o mujeres en periodo de lactancia con vacunas de ARNm cuando les corresponda según el grupo de priorización al que pertenezcan y en cualquier momento del embarazo.
De hecho, ha crecido la preocupación por que las personas embarazadas se vacunen lo antes posible tanto con la vacuna Pfizer o Moderna, luego de que cuatro mujeres embarazadas fallecieron sin anticuerpos.
Por último, si bien en algún momento se recomendó no concebir por dos o tres meses luego de recibir la vacuna, actualmente se sostiene que no existen riesgos ni para la persona ni para el bebe. No obstante en todos los casos se debe acudir a una visita medica para evaluar el caso clínico y determinar si la persona no presenta otras comorbilidades que pueden poner en peligro su vida a la hora de la vacunación.
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