Por muchos años la astrología nos llegó a cada uno de nosotrxs por medio de horóscopos de alguna revista conocida, o algún artículo muy “Cosmo” que nos hablaba en términos binarios sobre la “compatibilidad amorosa” de un signo con otro, yo mujer escorpio, debo conocer un hombre cancer, virgo u otro signo para garantizar que la cosa funcione y por fin pueda tener una pareja.
Esta forma de ver la astrología nos alejaba y mucho de lo que realmente nos quiere transmitir este hermoso y rico saber.
Esta disciplina lejos de percibir a las personas y al mundo en términos binarios, “yo soy” esto y por defecto no “lo Otro”, nos habla de energías zodiacales, y cómo, cada una de ellas se plasma y es vivida en nosotros según nuestro día y hora de nacimiento: la tan famosa Carta Natal.
Así fue, que pensando en ello, sentada una noche en el sillón de mi casa, me surgió la pregunta: cuál sería la energía que se plasma con mayor fuerza en la Comunidad LGTBQ?
Fue así como inmediatamente me conecté con la hermosa energía de acuario, hoy con mucha más fuerza ya que en este febrero pasado, se dio comienzo a su era, la cual transitaremos como humanidad los próximos 2000 años.
Acuario, como energía zodiacal, nos invita a generar una nueva conciencia del ser humano, vivir con libertad, igualdad, paz y fraternidad. Nos habla de un ciclo más humanitario, pensemos que acuario es el signo de la revolución, de las luchas sociales, del igualitarismo y la inclusión.
Por eso cuando pensaba cuál era la energía que representa a la comunidad, pude sentir la brisa e intención acuariana como motor de una historia transformadora, llena de resiliencia y sentido.
Un acuario que es y será el combustible de este movimiento de libertad, respeto y libertad, pero sin olvidar que en esta historia las otras 11 energías zodiacales están presentes y están actuando para que esto suceda. Un aries lleno de acción, un escorpio con ansias de transformación, guiado a través del diálogo geminiano para encontrar nuevas formas libres y llenas de sentido sagitariano, y claro y sin lugar a dudas muchas manos actoras y unidas de la comunidad que son las protagonistas de este gran momento en la historia de la humanidad.
por Adriana L. Cáceres.