Amelio Robles: el militar trans que apoyó la Revolución Mexicana

Foto: guanajuato.terceravia.mx

La historia de México está llena de sucesos revolucionarios. Muchos personajes importantes fueron parte de esa lucha y aún hoy son recordados en los libros y en las celebraciones, sin embargo, hay una persona de la que poco se ha hablado: Amelio Robles

Se trata de un militar trans que tuvo que enfrentarse a las represalias sociales por decidir ser quién era. Al día de hoy es —poco— conocido como el más grande soldado trans de México durante toda la época de la revolución.

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¿Quién fue Amelio Robles?

En un pequeño rancho de México en los últimos años del siglo XIX y en un contexto conservador de finales del siglo XIX, nació Amelio. Aunque desde su infancia fue socializado como “mujer”, se enfrentó a los prejuicios y en la adolescencia ya se había unido a los ejércitos de la revolución mexicana.

Amelio Robles posando
Fuente: BBC

Sin embargo, en los campos de batalla vivió un proceso de autodescubrimiento en el que se dio cuenta que su identidad de género no correspondía con la forma en la que era percibido por su entorno. De allí que se convirtiera en el militar trans más reconocido e importante de la revolución mexicana y de la historia en general.

En 1910, cuando ocurrió el levantamiento de armas conocido como ‘Plan de San Luis’ que fue convocado por el revolucionario Francisco I. Madero, Amelio Robles se unió a la lucha por la libertad. De hecho, en su paso por la revolución mexicana no salió a relucir su identidad de género, sino su capacidad para pelear. Fue conocido por siempre estar vestido con sombrero, saco, pantalón, corbata y una pistola envainada en su correa.

Biografía de Amelio Robles: Un militar trans de México

Amelio nació en 1889 y era percibido por la sociedad como una persona que no encajaba en los estándares establecidos para el contexto. El Gobierno de México lo reconoció como una persona “poco común”, pues sabía montar caballo y utilizar las armas desde muy joven.

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En 1912, con tan sólo 23 años, se unió a la lucha revolucionaria en las filas zapatistas. Al inicio comenzó con tareas de mensajería, traficando armas y víveres, así como algunas misiones especiales

Cuando logró ingresar como militar en las filas bélicas, solicitó ser reconocido con pronombres masculinos, comenzó a utilizar ropa considerada masculina y se autoreconoció como Amelio.

Según quienes estudian la revolución, esto se hacía debido a que muchas mujeres que participaban activamente en la lucha corrían el riesgo de ser violadas o de recibir alguna reprimenda. Sin embargo, según Gabriela Cano, historiadora, investigadora y docente: ese proceso reflejó la disforia de género que vivían algunas personas en la época, como el caso de Robles. Según afirma:

Amelio Robles sentado
Fuente: Infobae

“Amelio Robles transitó de una identidad femenina impuesta a una masculinidad deseada: se sentía y se comportaba como hombre y su aspecto era varonil (…)  se construyó una imagen corporal y una identidad social masculina con los recursos culturales a su alcance en un aislado poblado rural mexicano. Con gran habilidad, Robles manipuló a su favor dichos medios culturales: la pose o performance de género, una cultura visual del cuerpo inaugurada por la proliferación de retratos de estudio, y una prensa industrial ávida de noticias sensacionalistas que se interesó y dio legitimidad a la historia del revolucionario zapatista”.

Comenzó en la ”bola”, uno de los grupos de multitudes que eran reclutadas por guerrilleros en los pueblos. Amelio Robles se sintió atraído por el naciente Ejército Libertador del Sur, liderado por Emilio Zapata, y decidió unirse a la lucha de esta importante figura de la revolución mexicana.

El militar reconoció muchos años después que se unió a la “bola” por primera vez por mera locura de juventud, pues su idea era principalmente ser libre y no tanto apoyar la causa. Poco a poco, demostró su destreza y dejó de tener un cargo de teniente mayor y pasó a ser coronel. Lideró a grupos de hasta 1.000 hombres en los campos de batalla.

Según el portal del Gobierno de México, “una revisión más profunda a la vida de este hombre de guerra nos permite conocer una historia que no se revela a simple vista: Amelio fue un hombre trans que participó en la Revolución, logró ser nombrado coronel y consiguió que su identidad de género fuera reconocida”. 

Derechos LGBT y feminismo después de Amelio Robles

Según la BBC, la historiadora Noemí Juárez mencionó en una entrevista que “en cierto momento le beneficia. De repente, sabe que tiene un mundo fuera, en el que puede involucrarse en el manejo de las armas, del caballo e interactuar con otros grupos”. Por ello, el coronel Amelio Robles se convirtió en discusión a la hora de revisar el avance de los derechos de la comunidad trans y del feminismo.

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Amelio Robles junto a otros guerrilleros
Fuente: Lado B

Aunque el coronel Robles fue reconocido como “hombre” y no vio profundamente vulnerados sus derechos, esto no ocurrió con el resto de personas pertenecientes a la comunidad LGBT o con las mujeres. Muchas de ellas, durante la época de la revolución, se vieron obligadas a adoptar características asumidas como ‘masculinas’ para ser tomadas en cuenta, tal es el caso de Petra Herrera, quien en guerra fue conocida como Pedro Herrera; y Ángela Jiménez, quien pasó a ser Ángel Jiménez. Sin embargo, ambas retornaron a su expresión de género después de la guerra.

La historia de Amelio era diferente, pues verdaderamente dejó atrás todo rastro que quedaba de la vida bajo la que fue socializado. Lo anterior demostró el machismo que estaba —y está— muy latente en México, pues algunos otros militares como Manuel Palafox, que era homosexual, fueron víctimas de discriminación al ser rechazados y criticados. Para los grupos militares mexicanos, ser homosexual era símbolo de ‘feminidad’ y, por lo tanto, de debilidad.

«La aceptación de Amelio se da porque al fin y al cabo porque (…) representa los valores del revolucionario, de masculinidad, del hombre fuerte, valiente, macho. Del macho revolucionario, orgulloso» menciona para la BBC la historiadora Noemí Juárez.

Con esto no pretendemos decir que Amelio Robles tuvo una vida sencilla, pues sí es cierto que se enfrentó a muchas sanciones sociales después de su transición debido a las normas de identificación de género; sin embargo, representó un avance significativo en pro de los derechos de las comunidades disidentes.

Es así como el militar de México se transformó en uno de los personajes más importantes y representativos de la comunidad trans en México. Amelio Robles fue —y es— una figura de la cual se debería hablar mucho más, pues tuvo un impacto importante en una sociedad que ni siquiera reconocía las identidades trans.

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